jueves, junio 01, 2006

Soledad

Vuelve, mujer de manos tristes,
cóncava y vacía como un cuenco de cárcel.
Acaríciame el cerebro
con tus labradas manos de lija.

Vuelve a mi, desvanecida,
como la cola de una lagartija
Siente el latir de mi final,
huérfana y moribunda.

¡Vuelve! mujer de manos simples;
Te lavaré i te vestiré de nuevo
y seguirás muriendo en mí,
pero limpia i vestida de princesa.

Vuelve aquí, ¡maldita sea!
Aunque tu abrazo me asfixie.
Aunque me hunda en tu marea gris,
al menos moriré en tus manos.

Ru...fí

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Si esa persona ha de venir a ti lo hará. Acudirá como los lobos a la luna, te perseguirá en el tiempo hasta encontrarte y, si lo hace, no te soltará nunca.

11:20 p. m.  

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